jueves, 12 de abril de 2012

Alcoholismo


Alcoholismo: absorcion, distribucion, metabolizacion, eliminacion

En el caso del alcohol, la vía de administración es la vía oral, aunque no dudamos de la imaginación de los «consumidores» para crear una nueva, como ha ocurrido con otras drogas.
Los niveles de etanol son habitualmente medidos en términos de concentración en el torrente sanguíneo y este cociente se denomina niveles de etanol en sangre (BAC, Blood Alcohol Levels). Se distinguen 4 etapas básicas desde la ingestión  el alcohol hasta su metabolización o eliminación. Son por este orden, los procesos de Absorción, Distribución, Metabolización y Eliminación.

1. ABSORCIÓN:
El etanol es consumido, de forma prácticamente exclusiva, por vía oral, como decíamos. La absorción del etanol, tras un consumo oral se produce fundamentalmente en el tracto digestivo. En este sentido, y ya que el etanol es una molécula que no puede ser ionizada, el pH de ninguno de los compartimentos del tracto digestivo parece presentar influencia alguna en este proceso.

El  alcohol es una sustancia de bajo peso molecular (46), por lo tanto, es una sustancia que pasa fácilmente por las membranas de manera que cuando se ingiere alcohol este empieza a ser absorbido a nivel de la boca, esófago y estómago, pero el principal sitio de absorción es el intestino porque es aquí donde se encuentra la mayor superficie de contacto... no hay barreras para el alcohol. El alcohol se absorbe siguiendo una cinética de primer orden, más alcohol entra al organismo mientras más se tome.

El etanol47 se absorbe fundamentalmente en el intestino delgado, debido a que en este órgano la presencia de microvellosidades aumenta de forma notable la superficie que posibilita dicha absorción. 

La duración media del proceso gástrico de absorción del etanol ha sido cifrada en 1,7 minutos. En cualquier caso, este tiempo depende también de la dosis, ya que incrementando ésta se aumenta el tiempo de absorción. Por otra parte, existen una serie de factores que parecen afectar los procesos de incorporación-absorción y, en consecuencia, de biodisponibilidad. Entre estos cabe destacar (Holford, 1987):

-    El tiempo que el etanol permanece en el estómago no sólo produce un retraso en la absorción desde el intestino, sino que permite su metabolismo a través de los sistemas enzimáticos contenidos en este órgano. Esta latencia hacia el intestino se ve incrementada por factores tales como la presencia de comida sólida en el mismo.
-    Por el contrario, está dilación se ve reducida por la gasificación de las bebidas alcohólicas o la administración concurrente de antagonistas de los receptores histaminérgicos H2 .Estos factores delimitan la concentración máxima de etanol en sangre pero no parecen modificar el curso temporal del mismo.
-    Las diferencias genéticas en los enzimas capaces de metabolizar el etanol pueden producir importantes variaciones en la biodisponibilidad de esta sustancia. En este sentido el polimorfismo del enzima alcohol (ADH) puede producir importantes diferencias en los niveles de etanol en sangre. En este sentido, el menor nivel de expresión de este enzima en mujeres, propicia mayores concentraciones de etanol en éstas que en varones ante consumos idénticos. También existen diferencias raciales, constatándose una menor actividad de la ADH en la mucosa gástrica de los orientales respecto a los caucásicos.
-    El nivel de concentración de las diferentes bebidas alcohólicas también produce importantes diferencias en la velocidad de absorción. Así, existe una relación de U invertida entre concentración del preparado etílico y dicha velocidad, alcanzando ésta su nivel máximo cuando la concentración de etanol se sitúa en torno a un 40 %.
-    El nivel de circulación sanguínea es inversamente proporcional a la máxima concentración de etanol en sangre que se obtiene.
-    Pese a que históricamente ha existido cierta controversia al respecto, el momento del ciclo menstrual no parece poseer ninguna influencia en la farmacocinética del etanol.

2. DISTRIBUCIÓN:
Una vez absorbido el alcohol se distribuye por todo el organismo y dependiendo de la concentración de agua que contenga cada tejido es el daño que ocasiona. El alcohol se distribuye por nuestro organismo con mayor facilidad en los medios acuosos que en los lipídicos y puede acceder al torrente sanguíneo desde la cavidad oral, el esófago, el estómago, y los intestinos.
Respecto a su distribución, el alcohol llega a todo el organismo por lo que su volumen de distribución es de 42 litros, que es aproximadamente la cantidad de agua que hay en el organismo. El alcohol no se fija a ningún tejido ni se une a las proteínas del plasma y pasa fácilmente la barrera hemato-encefálica y la placentaria.
El alcohol se distribuye por el cuerpo hacia el Sistema Nervioso Central, debido a esta difusión más allá de los efectos psíquicos del alcohol, que son los que primeramente se perciben, el alcohol actúa también sobre los diferentes órganos del cuerpo. Los daños corporales se producen, por tanto, con el uso continuado de cantidades de alcohol que el organismo tiene dificultades para metabolizar, aunque el consumidor no perciba ningún peligro.
Como la absorción se inicia en el estómago, los efectos son más rápidos, por ello las personas sienten de inmediato un cambio que les hace comentar el típico «ya estoy con el punto». Cuando la cantidad de alcohol ingerido es exagerada, se produce un espasmo del píloro que ocasiona náusea y vómito.

3. METABOLIZACIÓN:
El tejido hepático metaboliza entre el 80 y 90 % del alcohol ingerido y otros como el riñón, el músculo cardíaco y los testículos, también intervienen en este proceso, por eso son los más dañados cuando se consume con exceso.
El primer metabolito48 del alcohol es el acetaldehido (ACCHO) que es un metabolito muy reactivo.
-    La principal vía de biotransformación es a través de la alcoholdeshidrogenasa (adh), que es una enzima citosólica que trabaja con NAD el cual transforma a NADH. Este sistema se satura rápidamente con el alcohol porque la cantidad de alcohol que se ingiere es muy alta.
-    Una segunda vía pero de importancia menor, es el sistema microsomal semejante al que se vio con relación a los otros fármacos; en este caso se denomina MEOS por Microsomal Hepato Oxidation Sistem, y este sistema como todo sistema microsomal requiere de NADPH que se transforma en NADP y existe consumo de oxígeno. Este sistema microsomal se induce por el consumo crónico de alcohol, por lo tanto, adquiere importancia cuando el consumo de alcohol es crónico o cuando las ingestas son muy altas.
-    Un tercer sistema es el sistema de la catalasa el que sólo adquiere importancia cuando las ingestas de alcohol son muy altas.

En estas tres vías de oxidación del alcohol tenemos como producto al ACCHO, y este ACCHO es oxidado posteriormente por la aldehidodeshidrogenasa de la que existen varias isoenzimas siendo la más importante la que se encuentra a nivel de la mitocondria. Esta enzima requiere NAD que es transformado en NADH, y el metabolito que se adquiere de la metabolización del ACCHO es el acetato. Este acetato sale a la circulación y es transformado por los tejidos periféricos a CO2 y H2O.
Cuando se ingiere alcohol, prácticamente no se encuentra ACCHO en la sangre y esto es debido a la gran eficiencia que posee la aldehidodeshidrogenasa.

4. ELIMINACIÓN:
El alcohol no abandona el organismo inmediatamente después de su ingestión. Una pequeña parte, de 2 al 8 %, se elimina con el aire expirado y con la orina y el sudor. La mayor parte es conducida al hígado (el 90 % del alcohol es biotransformado), en donde, primeramente, se convierte en aldehído acético y, después, en ácido acético, como explicábamos anteriormente. El ácido formado se metaboliza posteriormente en el organismo y sus productos finales son el anhídrido carbónico y agua. Este proceso metabólico es el que da al alcohol su elevado valor calórico. El alcohol tiene alrededor de 7 calorías por gramo. Las calorías que se obtienen del alcohol se consideran «vacías», ya que éste no contiene otros nutrientes beneficiosos, tales como vitaminas y minerales.

 El alcohol desaparece del organismo con una rapidez prácticamente constante, independientemente de que el individuo se halle en un ambiente caliente o frío, de si está en la cama o realizando ejercicios violentos.
El volumen de alcohol que se elimina del organismo, por unidad de tiempo, varía ligeramente de una a otra persona, y es algo mayor en los hombres que en las mujeres.
   
Un adolescente varón, de 65 Kg. Aproximadamente, necesita más de ocho horas para eliminar totalmente el alcohol de su organismo, y su alcoholemia no se sitúa dentro del límite legalmente autorizado para conducir hasta las seis horas. En el caso de una mujer, con un peso medio de 55 kg, la eliminación total no se produce hasta pasadas diez horas, y hasta las ocho horas su alcoholemia supera el límite legal para consumo.

De igual modo, la mujer tiene un nivel más bajo de alcoholdehidrogenasa (principal enzima del metabolismo del alcohol), por lo que absorbe más cantidad de alcohol que pasará a la sangre El tiempo que el organismo tarda en liberarse del alcohol también depende del volumen ingerido y del peso del individuo. Una persona de 70 kg. Requiere, por término medio, 5 horas y 30 minutos para eliminar 10 cm3 de ginebra y 13 horas para eliminar 30 cm3

- EFECTOS DE LA INGESTIÓN  DEL ALCOHOL:
Una persona que ha ingerido una pequeña cantidad de alcohol, se siente, generalmente estimulada, manifestándose de diferentes modos:
-    Cariñosos.
-    Sociables.
-    Puede convertirse fácilmente en una locuacidad excesiva.
-    Alteración del juicio crítico. 

El tipo de conducta difiere además según los individuos, y depende, en gran parte, de la personalidad.
Un mayor consumo de alcohol, conduce a:
-    Exaltación.
-    Exceso de confianza en sí mismo.
-    Alternancias súbitas entre el buen humor y la agresividad.
-    Deambulación incoherente. 

A medida que aumenta el influjo del alcohol, la marcha se hace más insegura   junto con los  movimientos.
La intoxicación más intensa conduce a la inconsciencia total. El alcohol es un tóxico;  por eso la intoxicación, incluso la más ligera, puede describirse como un efecto de envenenamiento. Sin embargo, en la práctica, el término intoxicación alcohólica se reserva para los grados más intensos de intoxicación. Incluso la intoxicación alcohólica pasajera, puede en ciertos casos, conducir a lesiones orgánicas permanentes (lo expondremos en los casos de consumo por menores).

Si el contenido de alcohol en la sangre alcanza a 4 - 5 gr. por mil, pueden paralizarse partes vitales del Sistema Nervioso Central, haciendo cesar la respiración y la acción del corazón, con muerte consiguiente.
De cualquier forma, los efectos del alcohol dependen de múltiples factores como son la cantidad total de alcohol, en cuanto tiempo se consume, el peso corporal, el género, la edad, el humor o estado de ánimo, el ambiente en que se consume, la tolerancia adquirida, el consumo de medicamento u otras drogas, etc.

En determinadas circunstancias el consumo de alcohol conduce a reacciones mentales anormales como demencia alcohólica. Sin embargo, esto no es frecuente, excepto en los alcohólicos.

Los síntomas que se observan (siempre en individuos alcoholizados) son:
-    Retraso de la actividad mental.
-    Falta de memoria.
-    Embotamiento de la sensibilidad.
-    Alteración de la capacidad de juzgar la situación de tiempo y espacio.
-    Temblores e incoordinación del movimiento muscular. 

También puede existir visión defectuosa, particularmente nocturna; reacciones tardías y aumento de la fatiga después de los esfuerzos.

Estas alteraciones funcionales significan que el individuo intoxicado no se haya en condiciones satisfactorias con respecto a situaciones tales como la conducción de vehículos y trabajos de precisión. El mecanismo causal de todos estos trastornos es el efecto de alcohol sobre el sistema nervioso, dado que es una droga psicodepresora, y por lo tanto, está alterada la transmisión de los impulsos nerviosos, que impiden el funcionamiento normal.

El alcohol produce sobre el organismo un efecto tóxico directo y un efecto sedante; además, la ingestión excesiva de alcohol durante periodos prolongados conduce a carencias en la nutrición y en otras necesidades orgánicas, lo cual complica la situación. Los casos avanzados requieren hospitalización.
Los efectos sobre los principales sistemas del organismo son acumulativos e incluyen un amplio rango de alteraciones en el aparato digestivo, entre las que destacan las úlceras de estómago y de duodeno, la pancreatitis crónica y la cirrosis hepática, así como lesiones irreversibles en los sistemas nerviosos central y periférico. 

Pueden llegar a producirse desmayos, alucinaciones e intensos temblores, síntomas del síndrome de abstinencia alcohólica más grave, y el delirium tremens, que puede ser mortal a pesar del tratamiento adecuado. Se ha demostrado en fechas recientes que la ingestión de alcohol durante la gestación, incluso en cantidades moderadas, puede producir daños graves en el feto, especialmente retraso en el desarrollo físico y mental; la forma más grave de este retraso,  se llama síndrome de alcoholismo fetal.    

Pero además el alcohol es una de las llamadas drogas «duras» y en algunos aspectos (síndrome de abstinencia) más peligrosa que las más temibles drogas ilegales. Por otra parte su proceso de adicción está potenciado ya que es  legal, universal y barata, incluso se potencia con una gran propaganda en la mayoría de los casos asociándole características que ciertamente no tiene, incluso contrarias a las que realmente posee.

Concluido este recorrido del alcohol y las afectaciones que este produce  sobre  el cuerpo humano, pasamos a  conceptualizar los trastornos por su uso, así como algunos conceptos clave para la comprensión de estos.

Uso, abuso, dependencias, criterios diagnósticos de los trastornos por uso del alcohol
M. Peñate Quintana (2001)49, sitúa a «la conducta adictiva al alcohol como una patología, que se pierde en los tiempos arcanos, es un trastorno que siempre ha acompañado a la humanidad en su evolución, las características comunes son: la falta de control, la impulsividad en el consumo, la compulsión, como una predisposición de la conducta».

La OMS en 1976 acuñó el término de síndrome de dependencia alcohólica que corresponde a «un estado psíquico y habitualmente también físico resultado del consumo de alcohol, caracterizado por una conducta y otras respuestas que siempre incluyen compulsión para ingerir alcohol de manera continuada o periódica, con objeto de experimentar efectos psíquicos o para evitar las molestias producidas por su ausencia».
La OMS define el alcoholismo como la ingestión diaria de alcohol superior a 50 gramos en la mujer y 70 gramos en el hombre (una copa de licor o un combinado tiene aproximadamente 40 gramos de alcohol, un cuarto de litro de vino 30 gramos y un cuarto de litro de cerveza 15 gramos).

Antes de avanzar en estas descripciones, presentamos una serie de conceptos claves que resultaran de gran ayuda para mejorar la comprensión de esta materia:

1. CONSUMO:
En función de los problemas que se pueden generar podemos identificar cuatro tipos o patrones de consumo:
- Consumo no problemático.
-    Consumo de riesgo.
- Consumo peligroso o problemático.
- Consumo perjudicial o patológico

Hay acuerdo en considerar como consumo de riesgo un consumo diario de entre 40 y 70 gramos (entre 50 cc y 90 cc) de alcohol puro (entre 4 y 7 UBE51), o un consumo no diario con una suma semanal de más de 280 gramos de alcohol puro, aunque no se llegue nunca a la embriaguez.
El concepto de consumo perjudicial52 es acuñado por la OMS en el CIE -10 designando a aquellas personas que presentan problemas físicos o psicológicos como consecuencia del consumo de alcohol, independientemente de la cantidad consumida.

2. ABUSO:
El concepto de abuso es entendido como no sobrepasar las dosis que nuestro cuerpo puede metabolizar, y, por otro, un componente que tiene que ver con las circunstancias del consumo.
Es el consumo que tiene consecuencias negativas para la salud de la personas y que también puede afectar negativamente a otros. Ejemplos: beber y sobrepasar los límites de alcoholemia si después se ha de conducir, emborracharse, mezclar alcohol con determinados medicamentos, etc No siempre es fácil establecer los límites entre uso y abuso.

3. USO:
Es el consumo que no repercute negativamente en la salud de la persona que utiliza la droga ni perjudica a las personas de alrededor. Ejemplos: beber una copa de cava en una fiesta después de haber cenado (consumo responsable), tomarse un medicamento mandado por el médico (consumo saludable).

4. HÁBITO:
Es el  consumo que se hace de  una sustancia cuando  hay adaptación a sus efectos. En el hábito existen el deseo de consumir pero se mantiene la dosis y el conseguir y consumir esta sustancia no supone una exigencia imperiosa (cafeína, teobromina…).

5. TOLERANCIA:
Es el estado de adaptación del organismo a la droga. Esto significa que para conseguir el mismo efecto producido por la droga hay que ir aumentando la dosis. Ejemplo: Una persona que prueba por primera vez el alcohol puede marearse con una copa, en cambio, una persona acostumbrada a beber necesita varias copas para marearse.

Algunos consumidores manifiestan que el alcohol no produce ningún efecto en ellos, debido a este fenómeno, del mismo modo las personas que abusan del alcohol y las que las rodean pueden no darse  cuenta de que este comportamiento abusivo es un problema.

Podemos establecer la siguiente clasificación en función del efecto de la propia sustancia:

- Tolerancia aguda: El efecto intenso de la droga disminuye ya que el consumo de esta se está repitiendo en un espacio breve de tiempo. Es decir, no por consumir más cantidad vamos a conseguir un efecto superior.
- Tolerancia inversa o sensibilización: El efecto es intenso aun consumiendo pequeñas cantidades de la sustancia. Es típica en los alcohólicos derivada de la hepatopatía crónica53.
- Tolerancia cruzada o recíproca: Cuando una persona desarrolla tolerancia hacia un tóxico (alcohol), de un grupo determinado (depresoras del SNC), presentará la misma, tolerancia, hacia otros del mismo grupo (Amytal, Butisol, Nembutal, Fenobarbital) aún cuando su consumo no sea habitual.
Podríamos decir que la tolerancia es una creación digna del más perspicaz de los inventores, el mejor ingenio para crear alcohólicos/as, ya que su aparición provoca  el incremento de las dosis administradas/ingeridas, ayudando al desarrollo de la dependencia o del síndrome de abstinencia en el caso de no ser fiel a su mandato.

6. DEPENDENCIA:
La dependencia se manifiesta a través del impulso irresistible a seguir consumiendo alcohol, aún a sabiendas de los perjuicios que produce. El bebedor en situación de dependencia ha perdido la capacidad de control sobre el consumo de alcohol:

- La dependencia física es el malestar físico experimentado por el organismo debido a la ausencia de la droga. Ejemplo: una persona con alcoholismo puede tener temblores, náuseas, insomnio, etc, si no bebe.
- La dependencia psíquica es el estado de inquietud psicológica y el fuerte deseo de consumir droga de forma continuada o periódica que experimenta la persona ante la falta de droga. Ejemplo: una persona alcohólica puede sentirse irritable, nerviosa y experimentar un fuerte impulso de beber.

SÍNDROME DE ABSTINENCIA del ALCOHOL (SAA):
Es un conjunto de signos y síntomas generalmente contrarios a la acción que producía la droga que lo ha provocado. Se puede originar por supresión de la droga o bien por precipitación. Más adelante ampliaremos estos conceptos. Tan solo tenemos que  añadir que es este síndrome de abstinencia el que provoca que un alcohólico tenga sueños vívidos, en los que sigue consumiendo, o se levante de madrugada para ingerir alcohol con el fin de que no descienda el nivel de alcohol en su organismo.



Imagen
Curso a distancia toda España y Latinoamerica: MEDIADOR-A SOCIAL EN PREVENCION DEL ALCOHOLISMO

Duración: 200 horas.

Matricula: 100 euros (+ envio+4%iva)Diploma acreditativo.
Solicitar mas informacion






Curso a distancia toda España y Latinoamerica: TÉCNICO EN PREVENCIÓN DE DROGODEPENDENCIAS Y ALCOHOLISMO





Tambien para Latinoamerica



ANIMACION, SERVICIOS EDUCATIVOS Y TIEMPO LIBRE

Formacion a Distancia y Permanente de Educadores/as formacionadistancia@yahoo.es
http://animacioncursos.com
http://animacion.synthasite.com
MSN: formacionadistancia@arrakis.es
Apartado 3049 -36205 VIGO - España
Tfno/Fax.: 986-25 38 66 / Movil: 677-52 37 07 / 615-38 30 03
http://animacionservicios.wordpress.com
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...